Arte en Territorio
En la Ciudad de México el arte y la cultura son más que expresiones estéticas; son motores de transformación social. Para dar voz a los proyectos que impactan a nuestras comunidades, iniciamos la serie de entrevistas "Arte en Territorio", donde exploraremos el mundo del programa Imaginación en Movimiento, Empresas y Emprendimientos Culturales de la Secretaría de Cultura de la CDMX. A través de estas charlas con egresados y líderes del proyecto, descubriremos cómo este programa impulsa la profesionalización de las prácticas artísticas y fomenta el acceso a la cultura, mejora la convivencia social y ofrece alternativas sostenibles para los creadores culturales.
Nuestra primera entrevista es con Marcela Jiménez López, coordinadora de este programa que ha sido clave para fortalecer a artistas, colectivos y empresas culturales en su desarrollo y consolidación. Durante la conversación, abordamos temas que van desde la historia del programa hasta su papel en la política cultural de la ciudad y los retos que enfrenta en su ejecución.
Marcela nos cuenta que el programa nació hace más de 15 años, inspirado en foros abiertos donde la comunidad artística expresó la necesidad de buscar alternativas a las convocatorias gubernamentales, influenciados por modelos internacionales como el de Colombia. "Más allá de las convocatorias de gobierno, los artistas querían saber qué hacer si no ganaban", explica. Así, surgió la idea de crear un espacio donde se les brindarán herramientas técnicas y prácticas para la creación de sus propias empresas culturales, explorando nichos de mercado, todo ello en un proceso de incubación que dura hasta nueve meses.
El programa está dirigido a artistas y colectivos de todas las disciplinas, que estén interesados en diseñar y desarrollar proyectos culturales independientes y sustentables. En palabras de Marcela, "el 60 por ciento de los participantes logran constituirse como Asociación Civil, fundación o cooperativa, y se les da seguimiento personalizado durante todo el proceso."
Cuando se le preguntó si el programa busca democratizar el acceso al arte en las periferias de la ciudad, Marcela es clara: "Queremos que los artistas trabajen a través del arte con las comunidades, también les ofrecemos herramientas para insertarse o trabajar con la iniciativa privada sin perder de vista su responsabilidad social." Este equilibrio entre arte y mercado es uno de los grandes retos del programa, pues, como señala Marcela, "la cultura debe verse como un derecho, no es sólo una mercancía."
En ese sentido, el programa se inscribe dentro de los derechos culturales que promueve la Secretaría de Cultura, brindando acceso a aquellos artistas que, aunque no necesariamente provienen de formaciones académicas tradicionales, tienen una profunda experiencia artística. "No es elitista, es inclusivo y busca empoderar a las personas para que utilicen la creatividad como recurso estratégico", subraya Marcela.
El contexto institucional ha sido un factor crucial para el éxito del programa. Marcela destaca las alianzas que han formado con instituciones como Indautor, IMPI, PROBONO AC, entre otras, permitiendo que los artistas registren sus obras y reciban asesoría fiscal. Estas alianzas han sido clave para que los participantes puedan llevar sus proyectos al siguiente nivel y consolidarse dentro de la industria cultural.
Respecto a los desafíos, Marcela menciona: "El cambio de administración siempre trae incertidumbres, pero hemos logrado mantener el enfoque en el fortalecimiento de las iniciativas de la sociedad civil y el acceso a la cultura." Además, señala que el programa tiene un enfoque claro en la equidad, fomentando el desarrollo cultural en todas las zonas de la ciudad, dando prioridad a las zonas de alta marginalidad.
Uno de los aspectos más fascinantes del programa es el impacto tangible que ha tenido en las vidas de los artistas. Marcela comparte varios casos de éxito que ilustran cómo la formación empresarial ha permitido que proyectos artísticos no solo sobrevivan, sino que prosperen. "Más del 85 por ciento de los egresados han alcanzado los diez años para sus proyectos culturales", comenta.
Entre los ejemplos más destacados, encontramos a Lily de la empresa Fomentando Valores Sociedad Civil, (FOVADI, S.C.), con más de 10 años de vida, transformó su obra de teatro en una plataforma para sanar emocionalmente las pérdidas, el duelo, a través de la escritura creativa, ahora trabaja en 14 países con mujeres e infancias vulnerables. También está el Coro Gay de la Ciudad de México, que ha trascendido barreras al formar parte de una red internacional y ha utilizado el arte como herramienta para contribuir combatir las violencias hacia la comunidad LGTBIQ+ . "Ellos han logrado llevar su mensaje de paz y diversidad por todo el país", relata Marcela.
El arte no existe en aislamiento; se nutre y florece en la interacción con las comunidades. Imaginación en movimiento busca crear un espacio compartido donde la creatividad se convierte en un vehículo de diálogo, reflexión colectiva y sustento. Cada obra, taller y proceso creativo es una conversación con el entorno, una respuesta a las historias, tensiones y sueños de quienes habitan estos espacios. Este proyecto es una plataforma donde las comunidades se convierten en coprotagonistas del arte, siendo el escenario para la co-creación de expresiones que reflejan las realidades y aspiraciones locales. En esta intersección, el arte adquiere su verdadero poder transformador. Esta iniciativa refuerza la idea de que el arte no es un lujo ni un privilegio de unos pocos, sino un derecho que debe estar al alcance de todos. En esta línea, el proyecto contribuye a la justicia social al ofrecer herramientas que fomentan la creatividad colectiva y la participación comunitaria. El arte se convierte aquí en una fuerza vital para mejorar la vida, una forma de activar la conciencia social y generar espacios de equidad y transformación.
Finalmente, Marcela reflexiona sobre la importancia de la difusión y la colaboración con medios como LMMX para dar a conocer estos logros. "A menudo, los programas se pierden en medio de tanta oferta cultural, por eso buscamos medios alternativos para que los artistas puedan compartir su trayectoria y que el público los conozca", concluye. La idea es llevar estas historias de éxito más allá de los círculos artísticos y atraer la atención de nuevos públicos, acercando el arte y la cultura a todos los rincones de la ciudad.
La serie de entrevistas "Arte en Territorio" se adentrará en las historias de artistas de los siete rubros disciplinarios que conforman el programa Imaginación en movimiento. A través de sus voces, conoceremos sus proyectos, sino también el impacto que estos tienen en sus comunidades. Nuestro objetivo es humanizar la experiencia artística, mostrando que el arte no es un ente aislado, sino una profunda expresión social, inseparable de las personas y su entorno. Estas entrevistas nos invitan a reflexionar sobre cómo el arte transforma y es transformado por quienes lo crean y lo viven.
Así inicia "Arte en Territorio", un espacio para conocer de cerca a los protagonistas que, a través de su creatividad, están transformando sus comunidades y nuestra sociedad. ¡Sigue las próximas entrevistas y descubre más sobre el impacto del arte en nuestro entorno!