21 junio 2024

La irreverencia de 31 Minutos desembarca en el Museo Franz Mayer (fotogalería)

El Museo Franz Mayer en la Ciudad de México abre sus puertas a una exposición que promete deleitar a niños y adultos por igual: 31 Minutos. Esta serie chilena, que ha trascendido fronteras y generaciones, llega a la CDMX con un montaje que no sólo celebra sus años de historia, sino también su profunda influencia cultural en toda Latinoamérica.

31 Minutos, creada por Álvaro Díaz y Pedro Peirano, debutó en 2003 en la televisión chilena, como una parodia de los noticieros formales, con títeres como protagonistas. Desde el inicio, el programa se distinguió por su humor ácido, ingenioso y, en ocasiones, surrealista. No se limitó a entretener; también abordó de las formas más ingeniosas temas sociales, medioambientales y educativos, siempre desde una perspectiva crítica y mordaz.

Los personajes principales, Tulio Triviño Tufillo, Juan Carlos Bodoque, Juanín Juan Harry, Policarpo Avendaño, Mario Hugo, Patana Tufillo y Calcetín con Rombos Man, se convirtieron en figuras emblemáticas de la infancia en Latinoamérica. Durante sus 68 episodios (que se pueden seguir disfrutando en youtube.com/@31minutos), el programa revolucionó la televisión y logró un arraigo sin precedentes con su audiencia.

El impacto cultural de 31 Minutos es innegable. En su país de origen, rápidamente se convirtió en un fenómeno que trascendió la pantalla chica, saltando a escenarios musicales y festivales de cine. Su éxito no tardó en cruzar fronteras, y la serie encontró un público entusiasta en México donde se emitió a través de Canal 11 y más tarde en Nickelodeon, ganándose el corazón de una generación. La audiencia mexicana, acostumbrada a un humor más bien homogéneo y predecible, recibió con agrado la originalidad y la audacia de la serie chilena.

La exposición en el Museo Franz Mayer ofrece una mirada detallada a sus personajes y creadores. Los visitantes podrán recorrer instalaciones que recrean el set del noticiero, conocer de cerca a sus personajes y explorar sus icónicas travesías y canciones célebres. La muestra incluye diez núcleos temáticos que narran la historia del programa, presentando los títeres originales, sets y ambientaciones.

¿Qué esperar?

  • Los costos: menores de 6 años entran gratis; de 7 a 17 años $90; a partir de 18 años $180; afiliados, estudiantes, maestros e INAPAM $90.
  • Siempre es buena idea llegar en transporte público al Centro Histórico, recuerda que la entrada es por Av. Hidalgo; pero si llegas en auto podrás estacionarte en el propio museo. El acceso es por la calle Valerio Trujano casi esquina con la calle Pensador Mexicano.
  • Pese a que el museo implementó un sistema escalonado por horarios (cada 15 minutos), podrás llegar y formarte para esperar tu ingreso independientemente de la hora que indica tu boleto. La fila no dura más de 15 minutos.
  • El número de personas en las salas hace que el calor sea irremediable, por lo que te aconsejamos llevar ropa fresca.
  • Calcula una hora de recorrido para que puedas apreciar con calma el abrumador material que ofrece la exposición.
  • Te recomendamos que acudas a la tienda del Museo Franz Mayer, en vez de hacer la larga espera en la tienda que colocaron al final del recorrido. Tendrás que salir del museo y reingresar por la entrada principal, pero así podrás elegir entre una mayor variedad de productos y sin hacer fila.
  • Si no te convencen los productos o sus precios, encontrarás varios puestitos que ofrecen pines, playeras y peluches de Tulio y compañía en la Plaza de Santa Veracruz (justo cerca de la entrada de Av. Hidalgo).

En definitiva, la llegada de 31 Minutos al Museo Franz Mayer es un acontecimiento que va más allá de la simple celebración de una serie televisiva. Es un reconocimiento a una obra que ha sabido combinar entretenimiento y conciencia social, misma que dejó una huella imborrable en la cultura popular de América Latina. Para quienes crecimos viendo a Tulio, Bodoque y Patana, esta exposición es una oportunidad invaluable para reencontrarnos con los recuerdos y reflexionar que, más allá de las risas, siempre hubo un mensaje militante.

Asimismo, esta exposición demuestra que la televisón pública, si bien dirigida, tiene el potencial de desarrollar productos audiovisuales de calidad y relevancia. Hacemos votos porque su llegada al país ayude a avivar la creatividad y la audacia de las productoras nacionales.

¿Dónde?

Museo Franz Mayer. Hidalgo 45, Centro Histórico de la CDMX, Guerrero, Cuauhtémoc, 06300.

Más info: https://franzmayer.org.mx/museo-31/